Agenda 2021: cinco desafíos mundiales heredados por la pandemia
- Miguel A. Conde
- 8 feb 2021
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 12 oct 2022
Especialistas coinciden que el año 2021 será de retos importantes para la economía, los gobiernos, las organizaciones y en general para toda la humanidad. Conoce los cinco temas heredados por la pandemia más relevantes en el mundo, que serán prioridad en la Agenda 2021.

La humanidad genera esperanzas para que el 2021 sea el año para vencer al COVID-19, empezar los procesos de recuperación y encaminarse para edificar un mundo más equitativo, incluyente, pacífico y sostenible. Conoce aquellos temas que los gobiernos del mundo deben trabajar, de acuerdo con algunos expertos, para generar una respuesta global a los efectos generados por la pandemia por coronavirus SARS-COV2:
1. Construcción de la confianza.
La pandemia ha hundido al planeta en incertidumbre. El COVID-19 ha sido devastador: sumiendo a la humanidad en sufrimiento y poniendo en crisis los medios de subsistencia de millones de personas. Especialistas coinciden que esta crisis ha dejado al descubierto las disfunciones de los gobiernos en el mundo, provocando la erosión en la confianza pública, principalmente por la percepción de una mala gestión de la pandemia. Klaus Schwab, fundador de Foro Económico Mundial, coloca el tema en la agenda 2021 al afirmar que “El restablecimiento de la confianza y el aumento de la cooperación mundial son cruciales para fomentar soluciones innovadoras y audaces para frenar la pandemia e impulsar una sólida recuperación”.
2. Conceptualización del modo de vida.
Luego de un año, regresar a la normalidad es aún esperanzador para muchos, pero ¿eso será posible?, o definitivamente, habría que ir aceptando la llamada ‘nueva normalidad’. Para algunos, en sí mismo, este planteamiento despierta controversia ¿Cómo aceptar un nuevo orden? cuando lo normal no era andar con cubrebocas, o encontrar a alguien y evitar el saludo de mano, o tomar clases en zoom desde casa, o evitar celebrar la Navidad en familia; sin embargo, la naturaleza hace un frío recordatorio: adaptarse, o morir.
En la agenda mundial para el 2021, es preciso definir y trabajar, para que esa nueva normalidad recupere en parte lo que se venía haciendo y también, revisar aquello que se había dejado de hacer, o no se estaba haciendo bien. El reto para cada grupo social en el mundo es que esa nueva normalidad debe impactar en la conducta del individuo, porque si no se ve reflejado en ella, entonces no se tiene por aprendida la lección. La pandemia ha evidenciado la vulnerabilidad de la humanidad, no será ocioso que el mundo se prepare para riesgos futuros; lo que se haga ahora, repercutirá en el bienestar de las siguientes generaciones.
"...esa nueva normalidad debe impactar en la conducta del individuo, porque si no se ve reflejado en ella, entonces no se tiene por aprendida la lección."
3. Recuperación económica.
El arranque del año 2021 será un recuento de daños. Regresar a los ritmos de actividad previos a la pandemia será mucho más lento y desigual, en el mejor de los casos, será una recuperación frágil, incluso, voces especializadas han señalado que por primera vez desde 1990, el desarrollo humano podría retroceder este año.
Expertos coinciden que en la agenda 2021 es importante considerar previsiones en materia de salud, educación, empleo y el reforzamiento de las políticas de inversión y gasto público. Además, consideran no perder de vista al país origen del virus, que fue uno de los pocos que continuó creciendo en 2020.
4. Crisis del aprendizaje generacional.
La UNESCO calculó una pérdida aproximada de dos tercios de un año académico en todo el mundo debido a los cierres de escuelas. A un año del inicio de la pandemia, más de 800 millones de estudiantes (equivalente a más de la mitad de la población mundial estudiantil), continúan enfrentando importantes interrupciones en su educación.

El cierre masivo de las actividades presenciales de instituciones educativas, significaron momentos críticos, entre ellos: la decisión de trasladar el aprendizaje de las aulas a los hogares, que representó enormes desafíos, tanto humanos como técnicos, en particular la desigualdad en el acceso a internet y equipamiento digital en el hogar; así como el estrés y frustración de maestros por el nivel de dominio de las tecnologías de la información y comunicación, y de plataformas digitales educativas, además de las dificultades que enfrentaron para tratar de mantener conexión con sus estudiantes para apoyar su aprendizaje, así como en el alcance de sus obligaciones, incluso fuera de sus horarios laborales habituales.
Entre los temas urgentes en la agenda 2021, se tiene que trabajar en los costos sociales más significativos causados por la pandemia, como la reducción de las disparidades en el sistema educativo, por un lado, en las oportunidades de crecimiento y desarrollo de niños y jóvenes, y por el otro en la reducción de las brechas en los resultados educativos, en particular en los aprendizajes y disminución de las tasas de deserción escolar, esto último vinculado con casos de familias que enfrentan crisis económica y ejercen presión sobre los niños para que trabajen y generen ingresos, provocando mayor exposición a la violencia y la explotación.
5. Riesgos por el cambio climático.
Como ya se mencionó, la pandemia reveló lo frágil que es la humanidad, pero también ha dejado el aprendizaje de no dejar de ver los detalles. Al respecto, expertos han advertido que una de las consecuencias probables del deshielo en los casquetes polares es la reaparición de bacterias y virus desconocidos para los que no hay tratamiento ni inmunidad. En la agenda 2021, los gobiernos, las universidades y los centros de investigación, deberán destinar su atención a este tema.

Sin duda esta pandemia nos enseña una gran lección; como seres humanos somos frágiles y muchas veces egoístas para con los demás, con el planeta y sobre todo con nosotros mismos. Si podemos rescatar algo positivo dentro de este mar de malas noticias y desesperanza es sin duda el cambio de mentalidad que se viene gestando en la mayoría de nosotros. Hoy más que nunca volteamos a ver al cuidado de nuestra salud y de nuestra economía como puntos rectores de nuestro quehacer diario. Nuevas maneras de alimentarnos sanamente, estrategias diversas para economizar, ahorrar y cuidar las finanzas personales, incluso, para los más afortunados y avispados, observar dentro de todo este caos una oportunidad de emprendimiento o crecimiento personal que…